Supólo que era su admirador.
Confirmólo con fuente ovejuna.
Observólo en los días posteriores.
Encontrólo en el Hi5.
Agrególo al mismo.
Platicólo por messenger.
Conociólo más mejor.
Ligólo.
Enamorólo.
Casólo.
Engañólo.
Y con suerte, pue'que... divorciólo pronto y dejólo pobre y desdichado.
Apolo, es su perro.
3 comentarios:
jajajajajajaja... historia digna del Óoooooorale!!
Leyolo y riolo harto harto.
JAJAJAJAJA
como con fuente ovejuna???!!! jajajajaja
Luego te hago un croquis Nacha. Ya le contesté a Gaby.
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